Actualizado a: 27 de octubre de 2023
Workstation vs. gaming PC, ¿cuál es mejor? O lo que es lo mismo, ¿cuál tendría que elegir? Sin duda alguna, esta es una pregunta con una respuesta muy simple y, al mismo tiempo, compleja. ¿Por qué? Pues porque todo depende de lo que necesitemos. A grandes rasgos, no existe una solución perfecta, ya que cada uno de estos «modelos» responde a unas necesidades o preferencias. Por lo tanto, lo primero que debes hacer a la hora de escoger entre una workstation o un pc gaming es entender qué es lo que quieres y qué es lo que necesitas.
Cuando respondas a esa pregunta, tendrás la respuesta que necesitas. No obstante, entiendo que esta mera introducción no es suficiciente para vosotros. A fin de cuentas, si habéis llegado a hasta este tema, lo que necesitáis es una respuesta más concreta y resolutiva. Eso es, precisamente, lo que pretendo ofreceros. No obstante, me gustaría explicaros cómo voy a organizar el presente artículo.
Durante la primera parte os hablaré de qué es cada una de nuestras opciones. Aunque pueda parecer obvio, cada una de ellas tiene sus propias particularidades. Es por eso que es importante entender cuáles son sus objetivos y características principales. En el proceso es necesario entender que no os hablaré de construcciones concretas, sino de descripciones generales.
Es decir, que el rendimiento y las capacidades de cada tipo de ordenador variarán en función de las piezas que usemos o la composición que compremos. Si queréis saber más al respecto, podéis consultar nuestros tutoriales sobre mejores PC y configuraciones para programar y mejores configuraciones PC Gamer por piezas. En ellos encontraréis mucha información sobre los ordenadores más interesantes del mercado. En la segunda, siendo parco, os responderé con el contexto previo que yo mismo os haya dado. Dicho esto, empezamos.
Workstation vs. gaming PC: ¿Qué es una workstation?
Lo primero que debemos hacer a la hora de enfrentarnos a la pregunta principal es entender qué es una workstation. A grandes rasgos, arrancando por una primera definición más sencilla, es (válgase la redundancia) una estanción de trabajo. Como tal, se define como un ordenador —normalmente de gama alta— especialmente diseñado para ejecutar tareas de alto rendimiento.
Así pues, cuando hablamos de una workstation, hablamos de un PC construido para que sus usuarios realicen tareas de carácter intensivo relacionadas con, por ejemplo, el diseño gráfico, el modelado 3D, la edición de vídeos, el renderizado, etc. De hecho, también se utilizan para desarrollo de aplicaciones y softwares, simulaciones científicas y otras tareas que requieran muchísima potencia. Son, por lo tanto, ordenadores normalmente de carácter profesional.
Como norma general, una workstation requiere de una serie de componentes de gama muy alta. De hecho, muchas veces emplean piezas que no están disponibles de cara al usuario en comercios y portales convencionales. Por supuesto, depende de la carga e intensidad de trabajo, pero aquí podemos encontrar los ordenadores más potentes de la industria. Curiosamente, no tienen ni por qué ser tan buenos en ámbitos como el gaming.
Así pues, cuando citamos a una workstation, es normal hablar de ordenadores con procesadores multinúcleo de alta gama con grandes cantidades de RAM. Inclusive, en algunos casos podemos abandonar los típicos 16, 23 o 64 GB para ir a cotas más altas. Aparte, están equipadas —como norma general— con tarjetas gráficas especializadas que escapan a las cualidades propias, inclusive, de la NVIDIA GeForce 4090 o la RTX 7000. Son todavía más potentes.
Potencia en estado puro
En ese sentido, podemos seguir citando componentes de gama alta, pero sería ser redundante. Creo que la idea la habréis pillado, más o menos, en este punto del artículo. A fin de cuentas, todo se resume en una potencia de gama muy alta. Generalmente, no se usa en ámbito usuario, puesto que los modelos más destacados están específicamente diseñados para usos empresariales, grandes profesionales, etc. Todo depende, por supuesto, pues hay workstations más modestas, pero es para que os hagáis una idea.
Pensad en ellas como ordenadores esencialmente construidos para trabajar en ámbitos que requieran mucha potencia. Así pues, y a diferencia de un ordenador convencional, suelen estar diseñados para ofrecer un alto grado de confiabilidad, estabilidad y rendimiento constante, aun en situaciones de carga de trabajo muy elevada. Están diseñadas para manejar grandes volúmenes de datos y ejecutar aplicaciones especializadas de manera eficiente.
Esto las convierte en una opción ideal para profesionales creativos, ingenieros, científicos y otros usuarios que necesitan un rendimiento excepcional para sus tareas específicas. En determinadas ocasiones, eso sí, alguien puede confundirlos con un PC convencional. La apariencia, de hecho, puede ser la misma, pero su interior es muy diferente. Eso se suele ver reflejado en el precio, siendo los modelos más caros que uno podría encontrar en el mercado… Si es que alguien los vende. No suele ser lo habitual.
Innovación
Por supuesto, hay un detalle más. A diferencia de los ordenadores convencionales, las estaciones de trabajo tienen todavía más presente la evolución de otras tecnologías. Véase, por ejemplo, la IA. Un ordenador gaming es bastante indiferente a la inteligencia artificial, más allá de las tecnologías que desarrollan las fabricantes de tarjetas gráficas. En efecto, hablo de AMD FSR y NVIDIA DLSS. En ese sentido, los PC para jugar sí tienen en cuenta la IA, pero no suelen ir más allá.
Una workstation sí que puede tener en cuenta las diferentes innovaciones de la IA, y de otros ámbitos, al abordar áreas de trabajo que pueden tener muy diferentes ramas. Entiéndase, por ejemplo, que los soportes de diseño, las plataformas de cálculo y análisis de datos, etc. son ámbitos en los que una workstation puede seguir muy vigente debido a su elevada potencia. Inclusive, aunque en el mundo de los videojuegos también tiene su aquel, la realidad virtual también tiene su sitio.
Como se están desarrollando ciertos ámbitos y áreas de trabajo que funcionan a través de la realidad virtual o la nube, una workstation puede tener piezas específicas para funcionar mejor en esos ámbitos. Por supuesto, todo depende de la función que busquemos desempeñar con la estación de trabajo. Todo depende del área profesional en la que ubiquemos a este modelo de PC.
En resumen, las workstations son el epítome de la potencia informática. Hablamos, por lo tanto, de ordenadores de un rendimiento excepcional que superan con creces (habitualmente) el rendimiento de los PC convencionales. Se definen como herramientas esenciales para profesionales y científicos que demandan lo mejor en términos de rendimiento, confiabilidad y versatilidad.
Workstation vs. gaming PC: ¿Qué es un PC Gaming?
Ahora que ya sabemos que es una workstation, podemos hablar de los ordenadores para videojuegos. Lo primero que quiero decir en ese sentido es que, aunque pueda parecer que un PC gaming es nada comparado a una workstation, no es así. Por norma general, una estación de trabajo es un ordenador diseñado para usos profesionales. Mientras, un PC Gaming está orientado a los videojuegos. Su potencia depende de la gama alta, pero que uno sea muy top no significa que el otro no pueda.
Dicho esto, casi todos sabréis qué son los ordenadores gaming. Pese a ello, y por si acaso, me gustaría deciros que hablamos de ordenadores especialmente diseñados, montados, optimizados y configurados para funcionar en la industria del videojuego. Es decir, que la idea es ofrecer un alto rendimiento aun con cargas de trabajo muy elevadas con los lanzamientos más potentes del mercado. Entiendase, por ejemplo, Cyberpunk 2077, el futuro GTA 6, la realidad virtual en el mundo del videojuego, etc.
A diferencia de los ordenadores convencionales, que están diseñadas para tareas generales como navegación web, procesamiento de texto y otras actividades diarias, los PC gaming están específicamente pensados para ejecutar videojuegos. ¿Y cuál es la diferencia? El nivel de exigencia y la importancia de las piezxas que se usan en la composición.
La importancia de un ordenador y sus piezas
Una de las partes más críticas de una PC gaming es la tarjeta gráfica o unidad de procesamiento gráfico (GPU). Las GPU de alta gama están diseñadas para manejar complejos cálculos gráficos en tiempo real. ¿Para qué? Pues para poder jugar en las resoluciones más altas con la mejor visual posible con un rendimiento en FPS de gran calidad. En ese sentido, las tarjetas gráficas son esenciales.
Además de la GPU, el procesador (CPU) es otro componente clave. Los juegos más punteros del mercado a menudo requieren un procesador potente para manejar las diversas informaciones y datos que proceden del susodicho juego. La CPU es el cerebro de cualquier ordenador, por lo que es quien se encarga de analizar cómo funcionan las físicas, por ejemplo. En ese sentido, y aqu´ñi tiene cierta similitud con las workstation, suele utilizar procesadores multinúcleo.
La memoria RAM también juega un papel crucial en una PC gaming. Una cantidad suficiente de RAM es esencial para almacenar temporalmente datos y archivos utilizados por el sistema operativo y las aplicaciones. Esto asegura que los juegos puedan cargarse rápidamente y que el sistema pueda realizar múltiples operaciones sin demasiada latencia. En términos de almacenamiento, los PC gaming a menudo utilizan unidades de estado sólido (SSD) para almacenamiento principal.
Los SSD son significativamente más rápidos que los discos duros tradicionales (HDD), lo que resulta en tiempos de carga más rápidos para juegos y un sistema operativo más ágil. Por supuesto, también es necesaria una buena refrigeración para que el calor (pues suelen generar mucho) no sean un problema. En resumen, un PC Gaming es un ordenador esencialmente diseñado para ofrecer alto rendimiento en videojuegos. Puede darlo igualmente en otros ámbitos, pero esta es su principal función.
Workstation vs. gaming PC: principales diferencias
Llegados a este punto, podemos enfrentar la pregunta que planteamos al comienzo de este mismo esta. Para ello, lo primero que quiero hacer es ofreceros un resumen de las principales diferencias entre una workstation y un gaming PC. De hecho, solo con estas podemos obtener una respuesta, pero os la daré igualmente para que todo quede incluso más claro.
Propósito:
- Workstation. Diseñado para tareas computacionales intensivas y profesionales, como diseño gráfico, modelado 3D, simulaciones científicas y edición de video. Son ordenadores más especializados. Están pensados, mayormente, para el ámbito profesional.
- PC Gaming. Orientado específicamente para ejecutar videojuegos con gráficos de nivel superior, resoluciones elevadas y muchos FPS.
Tarjeta Gráfica (GPU):
- Workstation. Utiliza tarjetas gráficas profesionales como las NVIDIA Quadro o AMD Radeon Pro, optimizadas para precisión y rendimiento en aplicaciones especializadas.
- PC Gaming. Equipada con tarjetas gráficas de alto rendimiento como las NVIDIA GeForce o AMD Radeon, optimizadas para juegos y gráficos de alta calidad.
Procesador (CPU):
- PC Workstation. Puede utilizar procesadores de alta gama con múltiples núcleos para manejar cálculos complejos y tareas simultáneas.
- PC Gaming. También utiliza procesadores potentes, pero generalmente se enfocan más en el rendimiento por núcleo, crucial para juegos que no siempre aprovechan múltiples núcleos.
Memoria RAM:
- Workstation. Tiene grandes cantidades de RAM para manejar conjuntos de datos grandes y operaciones intensivas.
- PC Gaming. Aunque tiene una cantidad considerable de RAM, generalmente en el rango de 16 GB a 32 GB, se enfoca en la velocidad para mejorar el rendimiento del juego.
Almacenamiento:
- Workstation. Utiliza SSD rápidos para acceder rápidamente a grandes archivos y conjuntos de datos.
- PC Gaming. También utiliza SSDs para una experiencia de juego más rápida, pero también puede incluir discos duros adicionales para el almacenamiento masivo de juegos.
Sistema de Enfriamiento:
- Workstation. Incorpora sistemas de enfriamiento sofisticados para mantener temperaturas estables durante cargas de trabajo intensivas y prolongadas.
- PC Gaming. Tiene sistemas de enfriamiento efectivos para mantener temperaturas seguras durante sesiones de juego largas y exigentes.
Conectividad y Periféricos:
- Workstation. Tiene una variedad de puertos y conexiones para admitir dispositivos profesionales y periféricos especializados.
- PC Gaming. También ofrece una amplia gama de puertos, especialmente USB, para conectar controladores, teclados, ratones y otros dispositivos gaming.
Optimización de Software:
- Workstation. Utiliza controladores y software optimizados para aplicaciones profesionales y herramientas de productividad.
- PC Gaming. Se enfoca en optimizar controladores y configuraciones para juegos, priorizando el rendimiento y la experiencia del usuario durante el juego.
Precio:
- Workstation. Por lo general, son más caras debido a la alta calidad de los componentes y la optimización para tareas especializadas.
- PC Gaming. Aunque todavía pueden ser costosas, los ordenadores gaming suelen ser más accesibles en términos de precio en comparación con las workstations debido a ciertas concesiones en especificaciones y características especializadas.
Conclusiones: respuesta final
Cuando planteamos la pregunta Workstation vs. gaming PC debemos entender que la respuesta queda marcada por nuestras necesidades. Así pues, teniendo en cuenta (ahora sí) todo lo que hemos comentado con anterioridad, escogeremos una workstation cuando queramos adquirir un ordenador de carácter profesional en un ámbito especializado. No debemos malentender esto. Si estás empezando, por ejemplo, una workstation puede no ser necesaria.
Cuando hablamos de una estación de trabajo hacemos referencia a los ordenadores más potentes de la industria. Suelen estar enfocados para profesionales que trabajan con cargas de trabajo más elevadas. Es decir, necesitan mucho rendimiento al abordar proyectos muy grandes y exigentes en términos de potencia. Si eres, por ejemplo, un diseñador gráfico de una pequeña empresa, no tendrás que recurrir (necesariamente) a una.
Puede que sí, puede que no. Dependel tamapo del proyecto y los requisitos. Dicho esto, un ordenador gaming es diametralmente opuesto. Estos serán los que utilicen aquellos quienes busquen la mejor experiencia posible en el mundo de los videojuegos y/o los que se dediquen (o quieran hacerlo) a ello. Son herramientas tanto de ocio como de trabajo muy orientadas a jugar, por lo que su enfoque mucho más específico y no necesariamente profesional.