Actualizado a: 16 de mayo de 2024
Con los nuevos monitores 8K y las recientes tarjetas gráficas de gama alta lanzadas por AMD y NVIDIA, seguro que a más de un gamer se le ha abierto los ojos como platos al pensar en una configuración de PC gaming para jugar a esa resolución tan elevada.
Pues bien, en esta guía podrás encontrar todo lo que necesitas saber para este tipo de configuraciones.
Introducción
Recuerda que todos los componentes tienen que estar acompasados. Es decir, de poco sirve comprar un monitor 8K si tu tarjeta no tolera esas resoluciones de pantalla, y tampoco sirve de mucho tener una magnífica gráfica que acepte 8K si tu monitor no lo soporta.
Además, para mover los videojuegos con esas resoluciones se necesita un hardware potente que pueda ejecutar todos los procesos de una forma veloz y que no ves cómo tus partidas se transforman en un calvario debido a tirones o problemas con el rendimiento.
Configuración de PC para 8K
Para poderte montar un auténtico equipo con soporte para estas resoluciones, puedes tomar como referencia esta configuración de PC preparado para la era 8K:
CPU
Para la unidad central de procesamiento hemos elegido un AMD Ryzen 9 5900X a 3.7Ghz (hasta 4.8Ghz en modo turbo), con 12 núcleos y 24 threads simultáneos, y un TDP de 105W. En el caso de que prefieras Intel, puedes elegir un i7-12700K ó i7-13700K
Con estas características podrás ejecutar gráficos a 8K sin problemas de rendimiento, de forma fluida y conseguir que los videojuegos o software de diseño corra como nunca.
GPU
En cuanto a la GPU, puedes optar tanto por una configuración con NVIDIA GeForce 3/4000 Series como una AMD Radeon RX 6000 Series. La ventaja de optar por la de AMD es que vas a obtener un menor consumo, menos temperatura, un ahorro en el precio, aunque con las NVIDIA 3090 y 4090 conseguirás los mejores resultados
Por ejemplo, puedes usar alguna de estas opciones según te interese:
- Sino tenemos problemas de presupuesto, podemos optar por una RTX 4090 como esta, que nos dará el mejor rendimiento actualmente.
- EVGA NVIDIA GeForce RTX 3090 XC3 Ultra Gaming: una tarjeta gráfica con 24GB de GDDR6X, resoluciones 7680×4320, y puertos HDMI 2.1 y DisplayPort 1.4a.
- AMD Radeon RX 6950XT OC: una bestia con 16GB de GDDR6, resoluciones hasta 7680×4320, y puertos HDMI 2.1, Display 1.4b.
Ambas dos monstruos de los gráficos, con soporte para Ray Tracing y rendimientos similares en los benchmarks.
RAM
También será importante contar con una buena capacidad de memoria RAM. Con 16GB podría funcionar, aunque no es recomendable. Lo ideal es contar con unos 32GB de DDR4, o algo más. No obstante, si quieres usar otros software de diseño/edición para resoluciones 8K, puedes ver las recomendaciones de dicho programa, y puede que te topes con alguno que necesita 64 o 128GB incluso.
Aquí te recomendamos usar una Kingston HyperX Predator DDR4 4000Mhz. Venden kits para sumar los 32GB que buscamos para nuestra configuración. Una memoria de buena calidad, rápida, y suficiente para que tu procesador trabaje bien con todos sus núcleos y que se pueda mover gráficos 8K.
Placa base
La placa base no influirá, pero sí es importante comprar una decente, ya que es el nexo entre componentes como la RAM, CPU y GPU. Te recomendaría la marca ASUS, uno de los líderes mundiales para este tipo de PCBs avanzadas.
No te tienes que obsesionar con comprar placas muy caras, no conseguirás una mejora de rendimiento 8K así. Para el AMD, con un modelo Asus Prime X570-Pro está más que bien. Con ella se conseguirá unas prestaciones de E/S muy buenas para lo que buscas, así que no se puede pedir mucho más.
Para Intel debes optar por la Asus Prime Z690-A en el caso del i7-12700K, y de la Asus Prime Z790-A en el caso de elegir el i7-13700K.
Almacenamiento
Dependiendo para qué uses el equipo, puede que necesites uno o más discos duros. Por ejemplo, si vas a trabajar con diseño/edición de vídeo a 8K, esos archivos ocupan bastante espacio, por lo que no estaría de más en contar con una segunda unidad HDD de alta capacidad. En cambio, para gaming, no necesitarás tanto espacio.
En cualquier caso, la unidad de almacenamiento primaria debería ser tipo SSD para conseguir buenas velocidades de acceso. Mejor si es una M.2 NVMe PCIe. Así que, la recomendación para nuestra configuración sería un Samsung 970 EVO Plus 1TB.
Como unidad de almacenamiento secundario, podrías optar por otro SSD o por un HDD de mayor capacidad. Si quieres conseguir buenas velocidades, podrías optar por un Samsung 860 EVO de 2TB. Una alternativa sería un HDD WD Black 12TB.
Fuente de alimentación
Ten en cuenta que los componentes elegidos son de alto rendimiento, y especialmente la GPU va a necesitar bastante potencia. Por eso, se necesita contar con una gran fuente de alimentación capaz de suministrar todos los vatios que necesitas.
Puedes optar por una Corsair HX1000W 80 Plus Platinum de tipo modular. Con ella no tendrás problemas de alimentación para esta configuración de PC 8K.
Torre
La torre, o carcasa, es lo de menos. No va a influir en el rendimiento, pero sí que es un soporte para el hardware que has elegido y debe ser compatible con ATX. Te puedes evitar comprar torres muy caras y ahorrar en este sentido, aunque esto es algo más personal.
Lo que sí debería tener es un buen sistema de ventilación. Por ejemplo, puedes elegir una Corsair 7000D Airflow, con un diseño modding para gaming y cristal templado. Este modelo incluye USB 3.2, 2 ventiladores de 120mm incluidos en su zona frontal (con capacidad para 3) y uno trasero. También admite otros adicionales e incluso refrigeración líquida si se quiere agregar.
Monitor
Puedes usar tu propia Smart TV 8K si la tienes, así ahorrarás mucho dinero y tendrás un centro de entretenimiento en tu salón. En cambio, si quieres un PC gaming completo, necesitarás un monitor capaz de soportar resoluciones 8K.
En este sentido, es complicado encontrar monitores 8K, ya que la mayoría son 4K aún. Pero sí que hay algún que otro modelo, y te recomiendo el Dell UltraSharp UP3218K LED de 32″ con 6ms.