Synopsys.ai Copilot: el copiloto de IA generativa que acelera el diseño de chips

Última actualización: 9 de septiembre de 2025
Autor: Isaac
  • Synopsys.ai Copilot aplica GenAI en toda la pila EDA para guiar, automatizar y crear artefactos críticos con alta precisión.
  • Casos reales: -30% en onboarding, scripts 10-20x más rápidos y +35% productividad en verificación formal.
  • La integración con Ansys impulsa simulación con IA (SimAI + optiSLang) y el nuevo Engineering Copilot.
  • Oportunidad sólida a largo plazo con riesgos a corto por resultados y regulación de la compra de Ansys.

Copilot de IA para diseño de semiconductores

Synopsys ha dado un empujón importante a su propuesta de IA generativa para EDA con la ampliación de las capacidades de Synopsys.ai Copilot, un movimiento que busca acelerar el diseño de chips, gestionar complejidades crecientes y elevar la productividad en un sector muy tensionado por la falta de talento. Este avance, alineado con la integración de Ansys en su ecosistema, promete recortar de días a horas tareas clave y reducir los tiempos de adaptación de nuevos ingenieros.

Más allá de la novedad tecnológica, el impulso de Synopsys en IA generativa encaja con una narrativa de liderazgo a largo plazo en automatización del diseño electrónico, si bien su efecto en los beneficios a corto plazo puede ser limitado. En paralelo, el mercado sigue atento a dos vectores: la próxima publicación de resultados y la incertidumbre regulatoria alrededor de la adquisición de Ansys, factores que aún pesan en la ecuación de riesgo-oportunidad.

Qué es Synopsys.ai Copilot y por qué importa

Synopsys.ai Copilot se presenta como una tecnología pionera en EDA que aplica IA generativa en toda la pila de diseño, acercando al ingeniero una ayuda experta contextual sobre herramientas, flujos y generación de scripts. Su objetivo es claro: acelerar el time-to-silicon, mejorar la calidad y permitir que equipos con distintos niveles de experiencia avancen más rápido y con menos fricción.

Desde su anuncio inicial, Synopsys ha trabajado junto a Microsoft para construir el Copilot apoyándose en Azure OpenAI, entrenando el sistema con décadas de conocimiento acumulado en diseño de semiconductores. El resultado es una asistencia capaz de responder dudas sobre el uso de herramientas, generar scripts de flujo y, de forma llamativa, producir código RTL a partir de diálogo en lenguaje natural.

Las primeras implantaciones en clientes con acceso anticipado señalan impactos tangibles: búsquedas de documentación y generación de scripts que pasaban de horas a minutos, flujos acelerados y aumentos de productividad en verificación formal. Para compañías que manejan diseños mastodónticos, este tipo de eficiencias es oro puro.

Capacidades asistidas por GenAI: conocimiento y flujos

El Copilot ofrece un asistente de conocimiento y nuevas aplicaciones de asistencia al flujo de trabajo que ya usan clientes de primer nivel. Los ingenieros consultan la documentación, resuelven dudas de uso y automatizan pasos repetitivos sin tener que salir de su entorno.

Un dato contundente: los usuarios del asistente de conocimiento reportan una reducción del 30% del tiempo de onboarding para ingenieros en etapas tempranas. Ese ahorro en formación interna no solo recorta costes, también libera a los seniors para tareas de mayor valor.

La nueva app de asistente de workflow mejora el tiempo de solución de scripts de media 2X; en combinación con Synopsys PrimeTime, la generación de scripts se multiplica entre 10 y 20 veces respecto a los métodos tradicionales. Esto traduce la promesa de la GenAI en mejoras mensurables, lejos de lo aspiracional.

Gracias a estas eficiencias, perfiles júnior pueden trabajar con mayor autonomía manteniendo estándares de calidad, un punto crítico cuando escasean ingenieros con experiencia. Además, el asistente de conocimiento ya está disponible para todos los usuarios de Synopsys Cloud, tanto en SaaS como en BYOC.

La plataforma SaaS de Synopsys Cloud aloja a más de 100 startups en producción; con el asistente integrado en su flujo, estas compañías aceleran la productividad de ingeniería y acortan el camino hasta fábrica, algo vital en fases tempranas donde el reloj y el burn rate corren en dirección contraria.

  Domina el potencial de tu hardware con Unefon y las recargas de AT&T

Capacidades creativas de GenAI: de las aserciones formales al RTL

synopsys

En el lado creativo, Synopsys.ai Copilot genera aserciones formales y código RTL con una precisión sintáctica y funcional elevada. Clientes con acceso anticipado han comprimido ciclos de diseño y verificación de días a horas y de horas a minutos.

Un caso de referencia: un proveedor destacado de infraestructura de IA registró un +35% de productividad para ingenieros novatos y expertos en flujos de verificación formal, habilitado por la creación automatizada de bancos de pruebas formales con alta exactitud.

La combinación de ritmo y calidad permitió a ese equipo validar 10 componentes de diseño en 10 días, un hito difícil de imaginar sin apoyo intensivo de IA en tareas propensas a cuellos de botella.

Ansys en el ecosistema: simulación con IA y copilotos de ingeniería

Synopsys está empujando su liderazgo en IA hacia simulación y análisis gracias a la integración con Ansys. Ansys Engineering Copilot, presentado recientemente, funciona como asistente multifunción para acortar curvas de aprendizaje y elevar la velocidad de trabajo en las herramientas de simulación de Synopsys.

La última versión incorpora avances en Ansys SimAI, una aplicación independiente de la física que combina precisión predictiva de simulación con la velocidad de la IA. Al integrarse con Ansys optiSLang, acelera la creación de datasets y el entrenamiento de IA, desbloqueando más variaciones de diseño y recortando ciclos de desarrollo.

Esta alineación entre los ecosistemas de Synopsys y Ansys es estratégica: potencia de extremo a extremo, desde diseño lógico a análisis y simulación, con IA en el centro. El encaje técnico refuerza la tesis de producto, aunque persisten los riesgos regulatorios de la operación corporativa.

Productividad real en clientes: Microsoft y el listón del 99,9%

Microsoft colabora estrechamente con Synopsys en Copilot y ya lo prueba con sus equipos internos de diseño de silicio, los mismos que acaban de desvelar chips propios para centros de datos. La meta compartida: encontrar antes los problemas y abaratar su arreglo al final del ciclo.

Shankar Krishnamoorthy, responsable del grupo de automatización de diseño, remarca el exigente umbral de precisión: por debajo de un 99,9% no vale. Un fallo pequeño en una especificación de chip se traduce en cientos de millones, así que el enfoque de entrenamiento y control de calidad es radicalmente más estricto que en usos genéricos de IA.

El Copilot puede responder a consultas sobre herramientas, generar scripts de flujo y redactar RTL conversando en lenguaje natural. Ese puente entre intención en castellano o inglés y artefactos de ingeniería reduce fricción cognitiva y errores por traducción manual.

El contexto del sector: complejidad, talento y el ‘pico’ de la IA

La explosión de modelos tipo ChatGPT ha disparado la demanda de chips con enormes necesidades de cómputo, impulsando arquitecturas especializadas y diseños cada vez más complejos. Los cronogramas de chips punteros pueden dilatarse muchos meses; la promesa de la IA es acortarlos a un mes o menos en fases críticas.

El fin anticipado de la Ley de Moore obliga a buscar nuevas arquitecturas RISC‑V vs ARM y verticalizar en chips para IA, coche autónomo o drones; no hay suficientes ingenieros de alto nivel para cubrir el salto de complejidad, lo que convierte a la IA en palanca imprescindible.

Diseñar una GPU moderna puede involucrar cerca de mil personas coordinadas, con equipos que necesitan compartir estados, notas y decisiones constantemente. La IA generativa no solo programa o verifica; también ayuda a cohesionar la comunicación entre decenas o cientos de equipos.

  Samsung Exynos 1480 en el Galaxy A55 5G: un rendimiento superior al A44 en Geekbench

Ecosistema y competencia: Nvidia, Google DeepMind y universidades

Nvidia ha desarrollado ChipNeMo, un sistema de IA personalizado sobre modelos como Llama 2, entrenado con sus propios datos. Está pensado para convivir con herramientas EDA como las de Synopsys, respondiendo dudas sobre arquitectura GPU y generando código de diseño.

Tras un año de uso, el equipo de Nvidia lo considera especialmente útil para formar a ingenieros jóvenes y resumir notas y actualizaciones en organizaciones con hasta un centenar de equipos. Es un ejemplo claro de cómo la IA reduce fricción operativa.

Google DeepMind, por su parte, ha demostrado mejoras en síntesis lógica, la fase que transforma descripciones de comportamiento en circuitos concretos. Estas técnicas se aplican a sus TPU, mostrando que la IA puede exprimir el frontend del flujo para chips propios.

En el ámbito académico, grupos de la Universidad de Nueva York y otras instituciones exploran vías para acelerar diseño con GenAI; uno de los experimentos, bautizado ‘Chip Chat’, diseñó un chip en alrededor de un mes dialogando con un chatbot para generar Verilog.

Limitaciones actuales: verificación humana, calidad y horizonte temporal

No todo es coser y cantar: las herramientas de IA requieren validación humana meticulosa, especialmente en pipelines que van desde síntesis hasta verificación eléctrica. Hoy no existe una solución que automatice sin fisuras todo el proceso, de principio a fin.

Expertos como David Pan subrayan que, por ahora, la IA es más útil en formación, escritura de lenguajes de hardware y reporting de errores. El salto a una automatización integral está aún por materializarse.

Krishnamoorthy estima que la capacidad para crear de forma autónoma un chip funcional con IA generativa puede estar a unos cinco años vista, considerando riesgos como las ‘alucinaciones’ del modelo. Ese horizonte, sin embargo, se acorta con cada avance práctico en verificación, simulación y orquestación de agentes.

Hacia agentes de diseño: AgentEngineer y el siguiente peldaño

La base GenAI de Synopsys es el sustrato de su tecnología AgentEngineer para diseño de chips, con un primer prototipo ya mostrado. La idea es orquestar agentes especializados que coordinen tareas de diseño, verificación y análisis con mayor autonomía.

Con agentes que cooperan y se validan mutuamente, la cobertura de casos y corner cases crece sin disparar el tiempo humano. A medida que maduren las salvaguardas contra errores y la integración con simulación, estos agentes podrían asumir bloques completos del flujo.

Impacto económico y narrativa de inversión

Para el inversor, la tesis pasa por el liderazgo continuo en EDA impulsado por IA y la capacidad de ejecutar innovaciones que abran mercados y mejoren la productividad del cliente. La ampliación de Copilot refuerza la percepción de ventaja competitiva.

Las previsiones internas apuntan a ingresos de 12.400 millones de dólares y beneficios de 2.700 millones para 2028, lo que implica un CAGR de ingresos del 25,8% y un aumento del beneficio de 1.300 millones desde los 1.400 millones actuales.

Un análisis de valoración sugiere un precio razonable de 648,19 dólares, alrededor de un 8% de potencial sobre el precio actual. En la comunidad Simply Wall St, los objetivos de valor razonable oscilan entre 450 y 648 dólares según cinco enfoques distintos.

Ahora bien, a corto plazo, el catalizador más inmediato son los próximos resultados, y la sombra regulatoria sobre la adquisición de Ansys sigue presente. La mejora de Copilot fortalece el posicionamiento a largo plazo, pero es improbable que transforme en el acto los beneficios trimestrales o que neutralice por completo los riesgos de negocio actuales.

  Sistemas operativos online: ¿son el futuro? ¿cómo funcionan? ¿en qué se diferencian?

El papel de Synopsys Cloud y el alcance para startups

synopsys cloud

Con el asistente de conocimiento integrado, las startups alojadas en Synopsys Cloud acortan tiempos de aprendizaje y validación. En entornos con presupuestos ajustados y ventanas de mercado estrechas, esa aceleración puede ser decisiva.

El modelo SaaS y la opción BYOC permiten ajustar el consumo de cómputo y la seguridad a cada proyecto, reduciendo barreras de entrada para equipos pequeños que necesitan herramientas de clase mundial sin desplegar infraestructuras complejas.

Cómo Synopsys.ai Copilot cambia el día a día del ingeniero

En la práctica, el Copilot introduce tres cambios de calado: menos tiempo perdido buscando y entendiendo documentación; scripts y flujos generados y depurados en minutos; y generación controlada de artefactos críticos como aserciones o fragmentos RTL.

El resultado es un bucle de feedback más corto: más iteraciones por unidad de tiempo y mayor probabilidad de descubrir problemas pronto. Además, en equipos grandes, el copiloto actúa como memoria organizativa y tutor silencioso, lo que reduce dependencias de personas clave.

En verificación formal, la creación automática de bancos de pruebas con alta precisión no solo ahorra tiempo, también mejora la cobertura al proponer combinaciones menos obvias que un humano podría pasar por alto.

Sinergias con simulación: precisión predictiva a velocidad de IA

Con SimAI y optiSLang, Ansys acelera la generación de datasets y entrenamiento de modelos, facilitando explorar variantes de diseño que antes eran prohibitivas por coste de simulación o por tiempo.

Este enfoque híbrido (simulación + IA) permite que los ingenieros evalúen más hipótesis sin sacrificar la fidelidad de resultados, acercando decisiones de arquitectura a fases más tempranas con menor riesgo.

¿Qué diferencia a Synopsys frente a otras iniciativas?

Además de la profundidad de su suite EDA, destaca el esfuerzo por llevar la GenAI a toda la pila de diseño, con exigencias de precisión industrial y controles de calidad estrictos. Ese listón está muy por encima de aplicaciones genéricas de IA.

A diferencia de sistemas internos como ChipNeMo o de avances focalizados como la síntesis de DeepMind, Synopsys articula una propuesta transversal que cubre desde asistencia contextual y generación de artefactos hasta la conexión con simulación avanzada y, a futuro, agentes de diseño coordinados.

Buenas prácticas y realismo a pie de proyecto

Adoptar Copilot requiere criterios de validación, trazabilidad y revisión al mismo nivel que cualquier flujo crítico de silicio. La IA multiplica la velocidad, pero las organizaciones deben reforzar procesos para mantener la integridad técnica.

Las reglas de oro incluyen: verificación humana de outputs de la IA, integración con pipelines CI/CD de EDA, gestión de modelos y prompts, y monitorización continua de calidad y sesgos. Así se evita que la velocidad enmascare errores costosos.

Mirando al futuro cercano

La hoja de ruta apunta a un ecosistema donde asistentes, simulación potenciada por IA y agentes de diseño convergen para recortar meses del ciclo. La clave estará en cerrar el bucle con garantías: precisión, explicabilidad y auditoría técnica.

Si las capacidades actuales ya convierten horas en minutos en tareas clave, la evolución lógica es ampliar cobertura a más fases del flujo, todo ello manteniendo el estándar de precisión del 99,9% que exige la industria.

Synopsys.ai Copilot y su integración con el universo Ansys dibujan un cambio de ritmo en la ingeniería de chips: menos fricción, más autonomía para perfiles júnior y mejores decisiones apoyadas en IA. Persiste la cautela regulatoria y la necesidad de ver tracción sostenida, pero el vector tecnológico es inequívoco y ya deja cifras de impacto en productividad, calidad y velocidad que pocos pueden ignorar.

RISC-V vs ARM
Artículo relacionado:
RISC-V vs ARM: comparativa sobre las arquitecturas que dominarán el futuro ¿quién ganará?